Caza a Larga distancia: La técnica y los materiales

La caza a larga distancia está de moda. La adaptación de técnicas militares de tiro a, principalmente y en origen, el control de predadores se ha extendido a otros tipos de caza. Al margen de disquisiciones éticas sobre su aplicación a la caza común, lo cierto es que este moderno material asegura simplemente una mayor precisión.

El criterio y la conciencia del cazador, como en otros asuntos, tendrá que poner los límites a la hora de utilizarlo.

Vamos a introducirnos en esta nueva técnica y en los materiales y conocimientos para utilizarla. Para ello hemos probado, en caza real, un equipo formado por:

-Un visor Swarovski Z6i 5-30×50 P BT L.

-Un rifle Heym SR 21 Stutzem, calibre .243 Win.

-Un binocular telémetro Swarovski EL Range 10×42.

-Y un telescopio Swarovski de 35-60×5.

En la caza a larga distancia se han aplicado las técnicas de los francotiradores, lo que permite abatir con seguridad animales a mayor distancia y, lo que es más importante para mí, colocar el disparo en el lugar exacto con menor riesgo de dejar animales heridos.

Esto se basa en tres ejes fundamentales:

  • Los visores con torreta balística.
  • Los medidores de distancia
  • Y los programas balísticos.

Una de las partes principales son los visores con torreta balística, que básicamente es un visor con torretas de ajuste muy manejables, fáciles de visualizar y fiables, lo que permite cambiar con rapidez y facilidad el punto de impacto de la bala. Por poner un ejemplo, si tenemos un rifle puesto a 0 a 100 metros, pero tenemos que disparar a un blanco a 200 m, corregimos con las torretas los clics necesarios para que el 0 se modifique a 200 m.

Caza-a-larga-distancia-torreta-balistica

Detalle de la torreta balística del visor Swarovski Z6i 5-30×50 P BT L, en la que se aprecian sus anillas marcadas con distintos colores para facilitar los ajustes.

 

Una vez que hemos disparado, los volvemos a su sitio, y de nuevo el rifle está a 0 a 100 metros. Y podemos hacer lo mismo para cualquier distancia deseada, 250 m, 300 m, 350 m, 400 m, etc. Esto está muy bien en un campo de tiro, donde las dianas están situadas a distancias conocidas, pero ¿qué pasa en el campo con la caza real donde las distancias varían?

Entra en escena el segundo pilar sobre el que se basa la técnica, el medidor de distancia. Este nos dice con exactitud a qué distancia se encuentra el animal para que podamos realizar con certeza los ajustes de la cruceta.

Bien, tenemos nuestro visor con torreta balística y tenemos un animal a 280 metros de distancia, ¿cómo puedo saber cuántos clics tengo que corregir para que el disparo sea exacto?

Entra el tercer pilar, el programa balístico, una herramienta informática en la que metemos unos datos y nos calcula las correcciones. Hay una serie de datos que ya llevamos introducidos previamente, como son el modelo del rifle, del visor o las características de la munición que vamos a utilizar.

Otra información hay que meterla en el momento del disparo, entre ellas la más importante, la distancia de tiro. Pero no es la única, se pueden meter muchos más datos, como el ángulo del disparo, altura a la que estamos, presión atmosférica, velocidad del viento, incluso el efecto Coriolis (el efecto que tiene el giro de la Tierra sobre la trayectoria de la bala), etcétera.

EL EQUIPO

Nos fue cedido por la empresa Esteller, S.L.

El visor Z6i 5-30×50 P BT L, específicamente de rececho y con capacidad de aumentar la imagen hasta 30 veces, siendo uno de los más potentes del mercado. Además lleva retícula iluminada para día y noche y, como la mayoría de los visores para disparos a larga distancia, regulador de paralaje.

En cuanto a calidad y nitidez de imagen, bueno, lo que nos tiene acostumbrado Swarovski, ¡de lo mejor! La nitidez es magnífica, incluso en los bordes de la imagen. Esto, junto con la fina cruceta, que hace que sea muy agradable y seguro apuntar, y el sistema de anillos de colores para las diferentes distancias de ajuste, son los datos relevantes.

Además utilizamos los prismáticos El Range 10×42, que llevan incorporado el medidor de distancia, que es preciso y rápido en los cálculos. Tiene una opción muy interesante: que en una sola medición da la distancia, y corregida con el ángulo de inclinación del disparo, lo que simplifica mucho los cálculos.

El programa balístico (existen numerosos en el mercado, que se descargan en el teléfono móvil y con diferentes precios), hemos utilizado el de Swarovski, que, además de ser gratuito, encaja perfectamente con sus visores y con los rifles y munición europeos, lo que hace muy fácil su programación.

El rifle probado es un Heym SR 21 Stutzen .243W con cañón 52 cm, un precioso rifle con acción Mauser. Montado con el visor, el rifle mantenía un buen equilibrio y era muy manejable para transitar por el monte.

Las monturas, Recknagel; y la munición, Brenneke. Además, y debido a que la prueba se llevó a cabo en las montañas de Navarra donde existen muchas atalayas de observación, utilizamos un telescopio también Swarovski de 35-60×50, que nos fue muy útil.

Caza-a-larga-distancia

El rifle Heym SR 21 Stutzem, calibre .243 Win. montado con el visor y el binocular con telémetro Swarovski EL Range 10×42.

 

PRUEBAS DE TIRO Y CAZA

Una vez comprobado con el colimador, realizamos en el campo de tiro una primera aproximación a 50 m, para ponerlo a 0 a 100 m, haciendo grupos de 3 disparos y sucesivas correcciones hasta conseguirlo. Comprobamos que agrupaba en menos de ½ MOA a esta distancia.

A partir de aquí entró en función el programa balístico. Solicitamos al programa que nos diese las correcciones para 200 m, que en este caso eran 5 clics, y esta distancia la marcamos con la anilla verde. Después hicimos lo mismo para 300 m, que necesitó 7 clics, y marcamos con anilla amarilla, y 10 clics para los 400 m, que marcamos con anilla roja.

Comprobamos que en el campo de tiro todo estaba correcto, e hicimos los ajustes necesarios en base a los datos del programa El rifle estaba preparado y sobre mí cayó la responsabilidad de probarlo en caza real. Pero el tema no iba a ser tan sencillo, porque los corzos (sobre los que queríamos probar el equipo) decidieron no ponerlo fácil.

Los meses de mayo y junio, en los que probaba el material, fueron una pesadilla. Numerosas salidas y aguardos para no ver nada. ¡Desesperante! Por fin localicé un campo en medio de un espeso bosque, que lo frecuentaban varias corzas. Decidí hacer una espera una calurosa tarde de julio.

La temperatura era de 36 ºC (que para Navarra es muy alta) y tuve que esperar un buen rato hasta que por la derecha, y al final del campo, vi una mancha oscura y larga. A través de los prismáticos pude observar con nitidez un gato montés, totalmente relajado, a varios metros de la linde del monte. Se venden caros los gatos salvajes para verlos, por lo que me quedé absorto observándolo mientras que tranquilamente se desplazaba en mi dirección.

Caza-a-larga-distancia-gato

La gata montés del relato, que amenizó la espera del autor.

Siguió su camino hasta llegar a unos 5 metros de donde yo estaba sentado, y ahí detectó que pasaba algo porque me clavó sus ojos amarillentos. Pero, para mi sorpresa, no salió huyendo, movía sin mucha inquietud la cabeza de un lado para otro intentando saber lo que se escondía tras el traje de camuflaje. ¡No me lo podía creer!

Calculo que estaríamos así más de 8 minutos, una eternidad cuando estás en el campo frente a un animal de este tipo, cuando de repente algo llamó su atención. Con el rabillo del ojo vi una corza comiendo tranquilamente, como a unos 120 m de distancia.

A aquella gata (ahora podía distinguir que era una joven hembra) le podía su instinto cazador y miraba con postura recechante a la lejana corza, para de repente volver a mirarme, cambiándole la cara con expresión de curiosidad. Entre mirarme a mí y mirar a la corza, tardó un rato en irse con tranquilidad, desapareciendo entre las matas del bosque.

Allí nos quedamos solos la corza y yo. Estuvo un rato pastando con tranquilidad, cuando levantó la cabeza bruscamente y orientó toda su atención al monte. Al momento escuché un ruido y vi aparecer a toda carrera, dando un gran salto para entrar en el escenario, un corzo macho. Como una centella fue hasta la hembra y comenzó a perseguirla, mientras que ella intentaba huir.

Aproveché para observarlo con los prismáticos… Era el macho que estaba buscando. Me preparé para disparar, pero no paraban de corretear en círculos de un lado para otro. La hembra, cansada, decidió buscar refugio en el monte y el macho la siguió con el cuello estirado, como si estuviese unido a ella por una cuerda invisible.

Desaparecieron y se hizo de nuevo el silencio, tan solo roto por los ladridos que de vez en cuando emitía el desafiante macho. La noche se me echó encima y estaba a punto de irme, cuando vi una sombra moverse por el campo de izquierda a derecha. Pude identificar que era un corzo y confirmar que era un macho con una rápida mirada a través de los prismáticos, mientras que medía la distancia y el ángulo de tiro.

Fue sencillo y rápido ajustar el anillo verde a 180 metros, le di al botón de encendido del punto rojo para la noche, y encaré el rifle. Cuando apenas podía ver nada a simple vista, veía el corzo a través del visor con toda nitidez y detalle, y pude valorar el tamaño de la cuerna sin ninguna dificultad. Este sí era el que estaba buscando y ahora solo necesitaba que se parase un momento para darme opción de tiro, pero empezó a girarse alejándose de mí y dejándome ver tan solo la parte trasera.

Le ladré con fuerza, se paró, levantó la cabeza y me miró. Estaba en una postura muy mala, de culo, y tan solo tenía opción de tiro en una pequeña franja del costillar, entre la nalga y el hombro. Pero lo veía tan nítido, los aumentos me lo acercaban tanto que llenaba el visor, el punto rojo me aseguraba tan fielmente el punto de impacto, y el apoyo del rifle era tan firme que decidí disparar.

Con el estruendo, vi al animal dar un gran salto hacia arriba, a la vez que soltaba una ‘coz’ al aire, emitiendo un agudo y penetrante chillido. «¡Le he pegado!», pensé, mientras que lo veía salir del campo a toda velocidad y meterse en el monte. Cargué de nuevo el rifle, cogí la linterna y me fui a buscarlo.

Caza-a-larga-distancia-corzo-muertoMientras que recorría el espacio hasta la zona del impacto me empezaron a entrar la dudas al repasar mentalmente el lance y ver lo rápido y seguro que el animal había corrido para protegerse.

Llegué al sitio de entrada y, moviéndome lo menos posible para no pisotear el escenario del lance (por si tenía que volver al día siguiente con un perro de rastro de sangre), conseguí encontrar abundante sangre en el suelo.

Decidí seguirla por lo claro que era el rastro, lo que me llevó a entrar al monte por una trocha. La seguí unos metros hasta el lugar donde el animal se había parado dejando un gran charco, pero no vi que el rastro continuase por ningún lado.

Paré un momento mirando lentamente a mi alrededor y vi, con enorme satisfacción y alivio, el animal muerto a un par de metros de la trocha.

Era un bonito corzo (para esta zona) con un perfecto disparo en el corazón.

LAS CORRECCIONES POSIBLES

El binocular-telemetro nos da datos como la distancia o el ángulo de tiro, que podemos introducir en los ajustes del visor. También está preparado para que se añadan otros cálculos, como la altura a la que estamos, la presión atmosférica, la velocidad del viento, incluso el efecto Coriolis (el efecto que tiene el giro de la Tierra sobre la trayectoria de la bala) y alguno más.

Pero hay otras variables que tendrá que tener en cuenta el cazador, como la correccion que hay que hacer al tener el corzo de culo, que cambia la perspectiva y hace que se tenga que apuntar más hacia la tripa que a la propia paletilla, para que la bala alcance el corazón.

Caza-a-larga-distancia-corzos

Textos y Fotos: Juan J. García Estévez

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

RESPONSABLE Ediciones Trofeo S. L - CIF B86731221 - Ediciones Trofeo
CONTACTO C/Musgo nº 2 Edificio Europa II-1D . 28023, Madrid (Madrid), España
Tel. 91 805 35 52 - Email: [email protected]
Puede ponerse en contacto con nuestro Delegado de Protección de Datos en el
email [email protected]
FINALIDADES Gestión de las solicitudes de suscripción recibidas a través de nuestra página web, envío de
comunicaciones comerciales, promocionales y de información de nuestros productos y/o servicios .
LEGITIMACION Consentimiento explícito del interesado ; Existencia de una relación contractual con el interesado
mediante contrato o precontrato
CONSERVACIÓN Gestión clientes : Durante un plazo de 5 años a partir de la última con{rmación de interés. Los datos
personales proporcionados se conservarán durante los plazos previstos por la legislación mercantil
respecto a la prescripción de responsabilidades, mientras no se solicite su supresión por el interesado
y ésta proceda, y mientras sean necesarios -incluyendo la necesidad de conservarlos durante los
plazos de prescripción aplicables-o pertinentes para la {nalidad para la cual hubieran sido recabados
o registrados
DESTINATARIOS Gestión clientes Ecommerce (suscripciones): Administración Tributaria ; Bancos, cajas de ahorros y
cajas rurales
Gestión clientes: Administración Tributaria ; Bancos, cajas de ahorros y cajas rurales ; Administración
pública con competencia en la materia
TRANSFERENCIAS INTERNACIONALES No realizamos transferencias internacionales de sus datos
PROCEDENCIA Suscriptores a la revista: El propio interesado o su representante legal . La vía principal de
suscripción son los formularios de nuestra página web.
DERECHOS Usted tiene derecho acceder a sus datos, recti{carlos, suprimirlos, limitar u oponerse a su tratamiento,
a su portabilidad, a no ser objeto de decisiones automatizadas, a retirar su consentimiento y a
presentar reclamaciones ante la Autoridad de Control (Agencia Española de Protección de Datos).
Más información en nuestra https://trofeocaza.com/politica-de-privacidad/ o
[email protected]

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Image Image Image Image Image Image Image Image Image Image Image Image

Image Image Image Image

Image Image Image

Image Image Image Image

Image Image Image

Image Image Image